El Colegio liceo San Miguel está embarcado en un proyecto de innovación educativa a través del cual los alumnos desarrollan sus habilidades y trabajan en equipo sobre temas puntuales, estando todas las materias vinculadas. 

Se realizó la presentación de uno de ellos, el que se denomina “Naturaleza bajo la lupa”, explicando los alcances del mismo el Padre director Miguel Suárez, la Subdirectora Angela Etchebarne y la profesora de Biología Gina Baldi. 

Suárez recordó que “el colegio desde hace dos años está embarcado en esta nueva forma de educar, realizándose micro experiencias en Inicial, Primaria y Secundaria y este año en particular nos hemos propuesto un trabajo en prototipo para 1º de Secundaria. 

Se vienen llevado adelante seis proyectos, cerrándose uno de estos, siendo los estudiantes los principales protagonistas del estudio, la investigación, el trabajo, destacando el compromiso de los docentes que desde un primer momento se han puesto al hombro esta nueva búsqueda de trabajo en ABP (Aprendizaje Basado en Proyectos). Entendemos que esta nueva modalidad es muy oportuna y aunque el cambio nos ha costado un poquito a todos, ya estamos viendo muchos logros. 

Los padres también han sido importantes impulsores de las nuevas propuestas porque han confiado en todo esto”.

La profesora Gina Baldi explicó que “los proyectos nacen desde los propios intereses de los chicos partiendo desde la realidad del medio y cuando comenzamos a planificar con los colegas, vimos que algo acuciante para ellos es ir en verano a la costa y ver el río con las algas. 

Comenzamos a hablar con ellos y allí surgió la idea de cómo filtrar los procesos del agua y ese fue el trabajo final, realizando una extensa investigación, visitando OSE, llevando adelante encuestas y todo lo que pudieron concretar para profundizar en la temática. 

Estamos posicionados en que es muy importante aprender mediante las situaciones-problemas y en base a lo que los alumnos van construyendo, avanzan en sus aprendizajes, siendo ellos los protagonistas y no los profesores. 

Dejamos de lado los programas fríos y a partir de una realidad vamos aportando ideas y soluciones a los problemas que se plantean. En la presentación final ellos mostraron las conclusiones, cómo construir un filtro, vinculándose de esta manera las diferentes materias y los docentes realizamos una evaluación mediante esta presentación que en definitiva fue más distendida.

Se sigue trabajando en los otros proyectos que son “Mercedes: nuestra ciudad”, “Aprender a competir”, “Candombe, color y alegría”, mientras que la formación cristiana es transversal y se encuentra presente en todas las propuestas”.

Finalmente, la profesora Angela Etchebarne explicó que “esta propuesta educativa se instaló en el 2018 siendo el alumno la parte central y todo lo que se hace surge de los intereses que ellos demuestran. El profesor es un guía, un facilitador y el 80% de los mismos se ha desarrollado a través de la virtualidad porque, debido a la pandemia, estuvimos varias semanas comunicándonos y desarrollando los trabajos a través de las diferentes plataformas. 

Se potencian las autonomías, la creatividad, son capaces de resolver problemas, estando muy motivados, lo que se aprecia en cada una de las presentaciones.

Queremos que el estudiante se sienta cómodo y tenga ganas de venir al colegio, porque de esta manera, estamos fortaleciendo aprendizajes y vínculos que serán sumamente favorables para todos”, finalizó expresando.